Porto-Vecchio es la tercera ciudad de Córcega y una importante sitio turístico, que atrae a miles de personas todos los veranos, aunque el resto del año es más tranquila y se convierte en un encantador pueblo costero. Está situada a 25 kilómetros de la espectacular ciudad de Bonifacio y a 143 de la capital corsa, Ajaccio, en el extremo sur de la Córcega, a los pies de las Aiguilles de Bavella, las más bellas montañas de la isla. Destaca el casco antiguo con fortificaciones del siglo XVI, el vieux port y los alrededores de Porto-Vecchio, con fantásticas playas, como la de Palombaggia o Santa Giulia, la bahía de Porto-Vechio, las islas Lavezzi, situadas en la costa de Bonifacio, y espectaculares espacios montañosos, con pueblos como el de l’Ospédale. El conjunto conforma un mosaico de paisajes que quedarán grabados en su memoria.
Cómo llegar a Porto-Vecchio
La ciudad de la sal acoge un tráfico internacional importante por avión, sobre todo en época estival. El aeropuerto más cercano es el de Figari (Sud Corse), que está a 15 km al suroeste de Porto-Vecchio. Recuerden que no hay vuelos directos desde España, es necesario coger un vuelo hasta París, Niza o Marsella y desde allí otro vuelo a Figari. Más información en nuestra página de «vuelos a Córcega«.
Por otra parte, se puede llegar en ferry desde Marsella. Para más información, visiten nuestra página de ferries. Una vez en Porto-Vecchio, les aconsejamos alquilar un coche para moverse por la región y por la isla.
Algo de historia de Porto-Vecchio
La ciudad de Porto-Vecchio fue construida en 1539 en lo alto de un promontorio rocoso por orden de los senadores genoveses. A pesar de poseer tierras fértiles y una buena situación en una bahía, la zona se ve afectada por el paludismo por las marismas saladas, y asediada por los piratas bárbaros. Por eso, la ciudadela fue destruida y reconstruida tres veces entre 1540 y 1589. En 1768 fue cedida a Francia.
La ciudad de Porto-Vecchio vivirá durante mucho tiempo a la sombra de la desarrollada Bonifacio, y sus actividades económicas principales se limitarían a la artesanía de la madera y del corcho y a la explotación de las marismas saladas que, a partir de 1944, gracias a que fueron saneadas por los americanos, fueron el inicio del despegue de la ciudad. De ahí que la ciudad de Porto-Vecchio sea conocida como «la ciudad de la sal«.
Qué ver
La ciudadela de Porto-Vecchio
La ville haute, construida en el siglo XVI, está situada en el corazón de la ciudad, en la que destacan monumentos como la iglesia Saint-Jean-Baptiste, con su bello campanario, la capilla Sainte-Croix, la puerta genovesa del siglo XVI y los numerosos bastiones, que protegían la antigua ciudadela.
Les proponemos una ruta a pie por el centro histórico, por las estrechas callejuelas llenas de fuentes, las escaleras y los pasos abovedados, pararse en cualquiera de las acogedoras plazas con las terrazas llenas de ambiente en temporada alta, visitar alguna de las pequeñas tiendas de artesanía abiertas hasta tarde, comer en algún restaurante con vistas panorámicas al bahía de Porto-Vecchio.
En la plaza del ayuntamiento podrán ver dos bastiones y el palacio del gobernador. Las antiguas fortificaciones están formadas por cinco bastiones, entre los que destaca el Bastion de Francia, que en la actualidad acoge exposiciones de pintura, y que ofrece buenas vistas panorámicas. Desde la Puerta genovesa, que está muy cerca, en el antiguo barrio de la calle Borgo, y la Pliazza di Pò pueden disfrutar de las magníficas vistas al bahía, al puerto deportivo y a las marismas saladas.
La plaza de la República es el auténtico centro de la ciudad, lleno de restaurantes y terrazas que dan un gran ambiente a la ciudad.
El puerto
El puerto de Porto-Vecchio fue construido en el fondo de la bahía para ofrecer cierta protección contra los ataques de los bárbaros en el pasado. En la actualidad es un puerto comercial y deportivo que acoger lujosos veleros. La zona de puerto está muy animada en temporada alta, con sus restaurantes, heladerías y cafés. Y el Quai d’honneur constituye un paseo agradable. No olviden que del puerto salen excursiones en barco a las islas Lavezzi y a otros lugares de la costa corsa.
La bahía de Porto-Vecchio
La ciudad de Porto-Vecchio es conocida y admirada sobre todo por el entorno natural excepcional en el que se encuentra: la bahía de Porto-Vecchio. Roquedales de color rojo, magníficas playas, marismas saladas, magnífica vegetación, pinares acogedores forman parte de este marco paradisíaco. Les proponemos una excursión para descubrir la bahía de Porto-Vecchio, siguiendo la carretera entre el verde de los pinares y el azul turquesa del mar, en busca de las más bellas playas de arena fina, de las calas más aisladas, lejos del mundanal ruido.
Marismas saladas
Las marismas se extienden a lo largo de unas diez hectáreas en torno a Porto-Vecchio, de ahí que se llame «la ciudad de la sal». En el mes de septiembre tiene lugar la recogida de la sal, y la ciudad le propone a los visitantes a asistir a este interesante espectáculo.
Bahía de Santa-Manza
Está situado cerca de la ciudad de Porto-Vecchio, y es muy recomendable por la bahía y la península en donde se encuentran algunas de las playas más bellas de arena fina y agua azul turquesa, como la playa de Maora, la más conocida, situada entre Punta-di-Rondinara y Punta-di-U-Capicciolu. Desde la bahía de Santa-Manza hay unas vistas bastante bellas de la ciudad de Bonifacio.
Excursiones y rutas por los alrededores de Porto-Vecchio
Las playas de Porto-Vecchio
En Porto-Vecchio se encuentran algunas de las más bellas playas de la isla. Entre ellas la más hermosa de todas, la playa de Palombaggia, bordeada de dunas y de pinos, y la playa Santa Guilia, que posee un gran pinar. En el norte están la playa de Cala Rossa, más pequeña pero con bellas vistas de la bahía; y la bahía de Ciprianu, de arena fina.
Playa de Palombaggia
Esta playa merece especial mención puesto que es considerada una de las más bonitas de Córcega. Se encuentra situada frente a la reserva natural de las islas Cerbicale, en un entorno paradisíaco que nada tiene que envidiar a las playas de las Bermudas o de Tahiti. Bordeada de altas dunas y de pinos centenarios, esta larga playa de arena fina y aguas azul turquesa conforma un marco de ensueño.
Además, la ruta para llegar a ella es también magnífica. Viniendo de Porto-Vecchio, hay que rodear la península de Piccovaggia por una carretera con vistas muy bellas. Al llegar, pueden dejar el coche en un parking y situarse en el extremo de la playa para evitar la concentración de gente.
Islas Lavezzi
Otra excursión posible es ir a las islas Lavezzi en barco, que están situadas en la costa de Bonifacio, a 10 km de la ciudad. Es una reserva marina protegida, y como las islas Cerbicale, es un auténtico paraíso para los amantes del submarinismo por la riqueza de su flora y de su fauna marinas. Una vez en las islas Lavezzi, pueden disfrutar de un magnífico paisaje de rocas graníticas grises que contrastan con el azul de las playas.
Islas Cerbicale
Es un sitio protegido por el Parque Marino Internacional de Bocas de Bonifacio. Se trata de un archipiélago compuesto por los islotes Forana, Piana, Maestra maria y Pietricaggiosa, así que por los peñascos de la Vacca y del Toro. Las islas están situadas frente a la playa de Palombaggia son accesibles sólo en barco o en jet-ski saliendo de Palombaggia. Esta reserva es el lugar ideal para hacer buceo a lo largo de los cañones submarinos llenos de una rica fauna y flora marinas. Los sitios más accesibles son el Toro y el barco hundido de la Pecorella (1967).
Pueblo de Ospedale
Ospedale se encuentra a una media hora de Porto-Vecchio y de sus playas, y se trata de un pueblo de montaña situado a 900 metros de altitud que acogía a viajeros y pastores desde el siglo XV. Es también el punto de partida de numerosas rutas de senderismo que atraviesan bosques, maquis y ríos. A la salida del pueblo en dirección a Zonza, hay un terraplén desde el que pueden contemplarse unas vistas panorámicas espectaculares sobre la bahía de Porto-Vecchio.
Lago artificial de Ospedale y Cascada de «Piscia di Gallu»
Más alto, en medio de un bosque de pinos lariccio y de hayas, se encuentra el lago artificial de Ospedale. Y a 4 km, la espectacular cascada de «Piscia di Gallu», que tiene una caída de 70 metros, un lugar que no deberían perderse. Es una excursión de 1h30 ida y vuelta.
Primera etapa de la ruta Mare a Mare Sud
A más de 1000 metros de altitud se encuentra la aldea de Cartalavonu, que es la primera etapa de una de las rutas de senderismo más importantes de la isla de Córcega: la ruta Mare a Mare Sud. El sendero une Porto-Vecchio y Propriano a lo largo de 5 etapas: un total de 5 horas por etapa atravesando los principales pueblos de la Alta Rocca: Ospedale, Cartalavonu, Carbini, Levie, Zonza, Quenza, Ghjallicu, Serra di Scopamena, Altagène, Sainte Lucie de Tallano, Fozzano y Burgu.
Sendero de la Punta Vacca Morta
Este sendero tiene su punto de partida en Cartalavonu y llega hasta los 1314 metros de altitud, pero la hora y media de ida y vuelta vale la pena, aunque sea en subida, ya que las vistas son impresionantes. Se ve en la costa oriental, la bahía de Porto-Vecchio y en la costa occidental, la bahía de Valincu.
Yacimiento arqueológicos
Yacimiento de Tappa
Complejo arqueológico del IV milenio a.C., situado a una altura de 60 metros, por lo que ofrece unas vistas muy buenas. Esta formado por un recinto que rodea un pueblo y una torre monumental. Está a 10 minutos en coche desde Porto-Vecchio en la carretera de Figari.
Yacimiento de Ceccia
Un pequeño sendero lleva al centro del pueblo (40 minutos ida y vuelta) que conduce a un monumento circular de unos 12 metros de diámetro de 1350 a.C. Las vistas son excepcionales. Está a 6 minutos en coche de Porto-Vecchio por la carretera de Figari; se encuentra a 4 km antes del pueblo de Sotta.
Yacimiento de Araghju
Fortaleza prehistórica monumental con un muro y un torreón. Está en la carretera de Bastia, y a la salida del pueblo de Trinité hay que coger a la izquierda en dirección del pueblo de Araggio. Se tarde alrededor de una hora ida y vuelta.
Yacimiento de Cucuruzzu y de Capula
Cucuruzzu es una zona fortificada de la Edad de Bronce y Capula, una fortificación medieval del siglo X. Desde el pueblo de Levie hay que coger la ruta de Sainte Lucie de Tallano. La visita dura 1h30 y cuesta 5,50 €.
Aiguilles de Bavella
En el corazón de la Alta Rocca, Bavella y sus agujas de granito afiladas ofrecen al visitante uno de los más bellos paisajes del sur de Córcega. El macizo llega a los 1900 metros de altitud, y es un lugar atractivo para los amantes de la escalada y el senderismo (por allí pasa la famosa ruta GR20).
La luz juega con los colores de estas magníficas rocas, que van del rojo claro al gris y blanco, creando espléndidos contrastes con el verde intenso de los bosques. Las mejores vistas de las agujas están en la cima de Bavella, a 1218 metros de altitud. Lo mejor es ir temprano por la mañana para evitar la gran cantidad de turistas que hay en temporada alta – además no es nada fácil aparcar -.
El col de Bavella está situado a algunos kilómetros del pueblo de Zonza, por la carretera D368, y ¡cúidado!, ya que es una carretera estrecha y sinuosa. Paren en las zonas acondicionada, los miradores, para admirar las vistas más bellas.
Desde el pueblo de Bavella parten numerosas rutas de senderismo:
El paseo de la capilla
Hay que salir de la fuente situada a la derecha del albergue de Bavella y seguir el torrente hasta llegar a la capilla con sus colores blancos y rosas. El paisaje es magnífico y las vistas a las agujas impresionantes.
El «trou de la bombe»
Es una ruta relativamente facil, unas 2-3 horas ida y vuelta desde el col de Bavella. El «trou de la bombe» es una curiosidad natural de lo más sorprendente. Se trata de una abertura de 8 metros de diámetro en las rocas que deja perplejos a los turistas.
Actividades en Porto-Vecchio
La región de Porto-Vecchio, situada entre mar y montañas, ofrece un entorno natural espectacular para realiza un amplio abanico de actividades. Además de senderismo, hay otras posibilidades, como: escalada, canyoning, paseos en BTT, paseos a caballo…
Escalada
De Bavella a Conca hay una multitud de sitios para practicar la escalada. La via ferrata es una nueva concepción de escalada, más accesible y menos peligrosa.
Canyoning
El macizo de Bavella ofrece tres sitios para hacer canyoning: la Purcaraccioa, le Pulischellu y la Vacca. Antes de Solenzara, bajando or la D268, el Fiumicelli está bien para el senderismo acuático en familia; y a alqunos kilómetros de la presa del Ospedale, está la bajada de Pisciadi Gallo, ideal para los iniciados.
Paseos a caballo
Existen numerosos ranchos y centros ecuestres que les proponen paseos y rutas a caballo por diferentes sitios al lado del mar.
Buceo
El sur de Córcega es una zona única con un ecosistema excepcional, una fauna y una flora marinas muy diversas, pero también amenazadas. Para su protección está el Parque marino internacional, que regula las actividades náuticas y subacuáticas, sobre todo en el archipiélago de las Lavezzi y de las islas Cerbicales, lugares ideales para hacer submarinismo. Las aguas son de una gran visibilidad, de 30 a 50 metros.
Vela y otros deportes náuticos
Bonifacio y Porto-Vecchio ofrecen un entorno ideal para realizar deportes náuticos, por las condiciones climáticas sobre todo: vela, esquí náutico, windsurf, etc.
Dónde dormir
La ciudad de Porto-Vecchio les ofrece una amplia red de hoteles en razón de la gran cantidad de turistas que vienen todos los años a esta parte de la isla de Córcega. Hay una gran cantidad de hoteles de lujo cerca de playas como la de Santa Giulia, la de palombaggia o cerca del Campo de golf de Lezza. También hay hoteles en el centro de la ciudad a precios más asequibles. Más información sobre alojamiento en Córcega, en nuestra página.